Cómo reducir el stress financiero

Cómo reducir el stress financiero

Actualidad

¿Qué entendemos por estrés y estrés financiero?

A menudo asociamos el estrés a problemas claramente identificables: factores familiares, causas laborales, enfermedades, situaciones derivadas de accidentes que causan shocks traumáticos (estrés postraumático) y, claro, el estrés que se deriva de situaciones económicas angustiosas que tienen la capacidad de alterar de forma nefasta nuestra tranquilidad emocional. Precisamente, de esta última, queremos hablarte, porque lo que se conoce como estrés financiero es una de las variantes más comunes en los problemas de estrés, y no necesariamente está asociado a las deudas.

El estrés ha sido vinculado con frecuencia a la vida moderna, a la contemporaneidad. Tiene relación directa con el “ajetreo”, con modos de vida que se enajenan, que fluctúan fuera de sí hacia un descentramiento del individuo desplazando y fragmentando la importancia de sí mismo en función de rutinas que le generan enormes dosis de inseguridad y desasosiego. El estrés es un mecanismo corporal que se activa ante una desproporción de circunstancias adversas que desbordan las posibilidades de los individuos para poder solventarlas. Estas situaciones que se hacen inmanejables suelen reflejarse en malestares tanto físicos como psicológicos que atentan contra la salud personal. El estrés financiero posee todas estas molestias que ponen en riesgo tu salud.

¿Cuáles son los síntomas que denotan que padecemos estrés?

Si estás padeciendo alguno de los signos que a continuación describiremos y tu principal preocupación son las finanzas, puedes estar padeciendo estrés financiero u otro tipo de estrés, atención:

  •   Te sientes deprimido, sufres depresiones regulares, estás ansioso.
  •   Sufres de dolor de cabeza habitualmente
  •   Sientes que te falta concentración en tus tareas y no tienes energía para resolverlas.
  •   Tienes dificultad para conciliar el sueño, acusas insomnio con frecuencia.
  •   Problemas con tu memoria, olvidos, etc.
  •   Tienes cambios de conducta imprevistos (vives con tristeza, estás apático o te irrita cualquier cosa, etc.); te mantienes en un cansancio prolongado.

Si en algo te identificas debes estar alerta y dedicarte cuidados porque podrías estar siendo afectado por estrés, y no sólo tú, tu familia y tus circunstancias más próximas: el trabajo y la vida social que llevas, pueden estar resintiéndose por lo que estás sufriendo.

¿Qué podemos hacer para prevenir el estrés financiero?

Existe coincidencia generalizada sobre las medidas que debes tomar en caso de que comiences a sentir la angustia del estrés financiero, pautas a seguir para evitar que se te transforme en una verdadera calamidad con efectos desastrosos en tu salud. En líneas generales, estos son los consejos que podrían evitar tal situación:

  •   Debes buscar asesoramiento. Si los problemas financieros te sobrepasan la ayuda es un requisito fundamental. No solo se puede obtener desde las organizaciones sociales o gubernamentales, ahora existen plataformas financieras digitales como finguru que te orientan adecuadamente permitiéndote desvincularte de los rasgos estresantes de tus finanzas, allí también vas recibir educación financiera vital para afrontar lo económico.
  •   Tienes que reconocer las prioridades. Analiza tus finanzas y enfócate en lo que más te perturbe para tratar de resolver o aminorar su impacto.
  •   Construye un presupuesto detallado, de tus ingresos y egresos a fin de que tengas conciencia clara de lo que puedas eliminar para poder tener una noción de tu capacidad de ahorro.
  •   Cuida tu salud, tanto física como psicológica. Salud y bienestar son, en las situaciones críticas de pandemia que vivimos, más importante que nunca. Es prioridad evitar efectos nocivos sobre nuestra salud, debemos protegernos y no esperar que la salud se agrave.